El último debate presidencial encajó mejor para el show propuesto sobre todo por Macri. Roberto Lavagna no entró en ese juego, ni en la grieta ni en los eslóganes del resto de los candidatos. Resultó el único que ofreció propuestas y es el único que le puede ganar a Alberto Fernández en un balotaje. En otros términos, se pudo escuchar a un Lavagna propositivo, conceptual. Ahí es donde radica la diferencia principal del candidato a presidente por Consenso Federal con respecto a los otros. Su desafío en este debate y en el anterior fue empalmar el fondo (sus ideas) con la forma (el poco tiempo para explayarse). No obstante esa dificultad, y mientras Macri y Fernández se apoderaban del show de la grieta, Lavagna se animó a no menospreciar al electorado. Su discurso se sostuvo con propuestas y no con chicanas. Roberto Lavagna llamó a la reflexión: “La paciencia de los pueblos tiene límites, no es infinita”, dijo, en referencia al conflicto que todavía afecta a Chile. “Errores que no se reconocen, son errores que se repiten”, agregó. Ofreció propuestas en medio de la tormenta verbal del resto. Enfatizó en la necesidad del crecimiento económico como condición de la estabilidad no solo económica, sino también política, y arrojó todas las ideas que faltaron en los demás expositores.
(Fuente www.perfil.com).
Deje un Comentario
Debes estar conectado para publicar un comentario.